Antes de comenzar tu retiro, toma una breve pausa. Respira profundamente tres veces. Sé consciente de la presencia amorosa de Dios, quien te acompaña en esta jornada de crecimiento y descubrimiento.
Mateo 5:12
Alégrense y pónganse contentos porque el premio que les espera en el cielo es abundante.
Puede que nos resulte difícil ver la relación que existe entre nuestras vidas y ese cielo lejano. Quizá debamos practicar una forma diferente de mirar, una nueva visión que abra los ojos del corazón al cielo en la tierra, una nueva perspectiva que diga: “Goza en el presente.“ Ver al Señor en todas las cosas y en todas las personas. Esta es una forma celestial de afrontar nuestra vida diaria.
¿Cómo te regocijas en tu llamada a ser discípulo?
¿De qué maneras te encuentras al Señor en tu vida cotidiana?
(Habla con Jesús rezando la siguiente oración o usando tus propias palabras.) O Dios, concédeme la gracia de un corazón gozoso y alegre. Bendíceme con una visión santa y sostenme en los momentos de duda. Haz que siempre sea consciente, o Dios, de tu presencia constante en mi vida.