Antes de comenzar tu retiro, toma una breve pausa. Respira profundamente tres veces. Sé consciente de la presencia amorosa de Dios, quien te acompaña en esta jornada de crecimiento y descubrimiento.
Marcos 10:21
Jesús lo miró con cariño y le dijo: “Una cosa te falta: ve, vende cuanto tienes y dáselo a los pobres y tendrás un tesoro en el cielo; después sígueme.”
Al inicio de esta historia el joven rico afirma su devoción por el cumplimiento de los Diez Mandamientos. Jesús demuestra su amor por el joven rico proponiéndole el reto de no sólo cumplir con los Mandamientos sino de convertirse en su discípulo, para que así el amor de Dios sea para él lo más importante. También se supone que nosotros cumplimos los Diez Mandamientos, pero a la vez también estamos llamados a la conversión, a dirigir nuestras vidas a Dios, siguiendo las enseñanzas de Jesucristo y sirviendo a los demás.
¿Qué es lo que me duele dejar en mi vida para seguir a Jesús?
¿Qué más puedo hacer para demostrar mi amor a Dios?
(Habla con Dios usando las palabras que desees o hazlo con la siguiente oración). Señor Jesús, tú me conoces y me amas. Ayúdame a entregarte todo mi ser.