Dedica unos momentos a relajarte y a encontrar la serenidad interior. Presta atención a tu respiración. Sé consciente de la presencia de Dios en la parte más profunda de tu ser.
Lucas 2:46,51-52
Luego de tres días lo encontraron en el templo … Regresó con ellos, fue a Nazaret y siguió bajo su autoridad. Su madre guardaba todas estas cosas en su corazón. Jesús crecía en [el] saber, en estatura y en gracia delante de Dios y de los hombres.
Cuando Jesús tenía 12 años era ya un niño creyente que conocía y seguía los Diez Mandamientos. Su interés en las Escrituras se intensificó a raíz de su conversación con los rabinos en el Templo. Cuando todos se fueron a casa, él se quedó más tiempo. Más tarde, cuando sus padres le encontraron, les demostró su amor y obediencia a los Mandamientos y a sus padres al obedecerles.
¿Cómo me esfuerzo por seguir los Diez Mandamientos?
¿Cómo se me pide que crezca en sabiduría, edad y gracia?
(Habla con Jesús rezando la siguiente oración o usando tus propias palabras). Jesús, guíame a amar la ley de Dios, enséñame a ser obediente y crecer en sabiduría, edad y gracia, ante Dios y el prójimo.