Antes de comenzar tu retiro, prepárate tomando una pausa para relajarte. Respira lenta y profundamente. Cuando estés relajado, deja que la presencia bondadosa de Dios te llene con cada respiración que tomes.
Juan 1:14
La Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros. Y nosotros hemos contemplado su gloria, gloria que recibe del Padre como Hijo único, lleno de gracia y verdad.
Hemos sido obsequiados con poder vislumbrar la gloria, la gracia y la verdad de Dios. En nuestra experiencia del amor vemos como “la Palabra se hace carne“ con nuestros propios ojos. A menudo las experiencias son más profundas de lo que las palabras pueden describir, pero aún así tratamos de usarlas para intentar captar la esencia de quién es Dios y lo que para nosotros significa conocerle. Compartir nuestras experiencias las mantiene con vida y las ayuda a dar testimonio de la gloria de la Palabra hecha carne.
¿Qué muestras de la gloria, gracia y verdad de Dios has visto recientemente?
¿Cómo describirías esa experiencia a alguien?
(Habla con Jesús rezando la siguiente oración o usando tus propias palabras). Jesús, Palabra hecha carne, gracias por revelarnos la gloria de Dios. Concédeme la gracia de poder compartir mis experiencias libremente con los demás.