Susan Vogt es una mujer valiente. Escribió un libro Raising Kids Who Will Make a Difference [Educando hijos que marcarán una diferencia], Loyola Press, y en él dio a sus hijos la última palabra al final de cada capítulo. Aprendí mucho de lo dicho por Susan, pero aprendí aun más de lo dicho por sus hijos. A continuación les presento la respuesta de su hijo Brian al capítulo relacionado con el servicio a los demás:
“Recuerdo haber trabajado en el proyecto de vivienda Anawim Housing, limpiando y ordenando casas viejas. Probablemente lo habría disfrutado mejor si algún amigo hubiera venido conmigo. Eso puede crear una diferencia entre lo que es una buena y una mala experiencia. Sé que probablemente realizamos muchas iniciativas provechosas cuando era más joven, pero, francamente hablando, todo se ha desvanecido de mi memoria y lo único que realmente me queda es la impresión que dejaron mis padres en mí al destinar tiempo, en medio de sus ocupaciones para prestar un servicio comunitario. Esta acción llevó consigo un mensaje mucho más contundente que cualquier cosa que me hayan dicho respecto a algún tema en especial”.
“Mi servicio con Habitat for Humanity fue el que más me impactó. El trabajo en equipo tuvo resultados tangibles. No obstante, el cimiento de esa experiencia, lo había construido mediante las actividades familiares”.
En el párrafo anterior Brian nos presenta una mini lección sobre cómo educar hijos que se interesen por los demás:
Si desea aprender más acerca de la sabiduría y prácticas del libro escrito por Vogt, búsquelo en www.loyolapress.com. Si desea leer un libro en español acerca de la educación de los hijos, le recomendamos Educando Hijos en la plenitud de la fe, lo encuentra en la misma página digital.